EL segmento de decoración y arquitectura tiene una constante innovación, muchas veces solo estética, pero muchas otras con un objetivo de eficiencia energética y cuidado del medio ambiente. Las fachadas ventiladas entran en esta última clasificación, y son verdaderamente innovadoras.
Los arquitectos ven la fachada ventilada como una solución ecológica para lograr la eficiencia energética del edificio.
¿Qué son y como funcionan las fachadas ventiladas?
La fachada ventilada es un sistema de cerramiento que permite la colocación sobre una hoja interior, de una capa aislante y una hoja exterior mediante una estructura portante.
El funcionamiento de este sistema es muy simple: existe una distancia de separación entre las capas que permite el paso de una corriente de aire entre el aislante y el revestimiento, creando una ventilación natural.
Este efecto tiene un doble uso: en verano, mediante transferencia de calor por convección, la fachada ventilada se calienta y hace circular el aire en el interior de la cámara, sustituyendo el aire caliente por aire más frío, que refresca el interior del ambiente. Por otro lado, durante los meses de invierno, el aire de la cámara se calienta, pero no lo suficiente como para circular y renovarse, produciendo un efecto de calefacción natural.
La vanguardia de la mejora energética
Por el sistema expuesto de funcionamiento de las fachadas ventiladas, se desprende que su uso permite un gran ahorro de costes y una mejora en la eficiencia energetica del hogar. Por caso, en verano se necesitará menos aire acondicionado, y en invierno, mucho menos calefacción, produciendo un triple efecto: ahorro de costes, eficiencia energética y cuidado del medio ambiente, un tema no menor.
Ventajas de la fachada ventilada
Hemos adelantado las principales ventajas de la fachada ventilada, un recurso que se ha vuelto muy popular en todo el mundo de la construcción, pero no son las únicas y su aceptación se apoya en sus numerosas ventajas.
Como veremos a continuación, este sistema ayuda a superar los problemas más habituales de las viviendas antiguas o mal aisladas.
Ahorro energético
La fachada ventilada, como hemos visto, permite un notable ahorro energético en el edificio gracias al efecto chimenea que se genera en su interior, que resulta en una menor absorción del calor en los meses cálidos y una menor dispersión en los fríos.
Pero, además, el sistema de fachada ventilada tiene las siguientes ventajas:
- Reduce saltos térmicos o diferencias notables de temperatura entre el día y la noche
- Evita humedad en los ambientes
- No se producen condensaciones intersticiales y superficiales interiores
- Evita puentes térmicos
- Aligera la envolvente
Mantenimiento
Generalmente, y debido a la capa de material que se utiliza en la hoja exterior de la fachada ventilada, su mantenimiento es sencillo. Los paneles están compuestos de aluminio, un material con nula necesidad de mantenimiento en condiciones normales.
Ligereza estructural
El cerramiento exterior, al ir anclado a la fachada, puede permitirse trabajar con materiales muy ligeros, como el aluminio antedicho, que no suponen un esfuerzo extra al edificio en comparación con las funciones que aporta.
Por último, nos queda destacar que en los últimos años, el sistema de fachada ventilada ha tenido una gran baja de precios que ha favorecido su aplicación a cualquier tipo de edificio, ya sea modernos o antiguos.